¿Qué diferencia hay entre un fisioterapeuta, un osteópata y un quiromasajista? Te lo contamos.
Queremos empezar estrenando este apartado aclarando estos tres conceptos que, a día de hoy, aunque por suerte cada día más gente los va teniendo más claros, aún hay quienes nos llegan a la consulta diciéndonos que han estado en un “masajista” y que no les ha quitado ese dolor que tienen… por un lado es normal.
El quiromasaje. ¿En qué consiste?
El quiromasaje es una formación no reglada, es decir, toda la formación que se imparte no tiene ningún tipo de validez académica y no es oficial. Por eso hay academias que dan cursos de masaje o quiromasaje que pueden durar 3 meses y otras que la duración de estos cursos puede llegar a durar hasta seis. Además, según establece el Boletín Oficial del Estado, un quiromasajista no puede realizar ningún tipo de masaje con una finalidad curativa o terapéutica. Dicho de otro modo, ante una contractura, una tendinitis o cualquier tipo de patología, por ley, no pueden ser tratadas por un quiromasajista o un masajista.
La fisioterapia. Diferencias respecto a la osteopatía.
Al contrario que el quiromasaje la fisioterapia sí es una formación universitaria, reglada y oficial, y habilita a sus profesionales, los fisioterapeutas, para tratar y curar personas y o patologías.
Según establece la Organización Mundial de la Salud: “La fisioterapia es el arte y la ciencia del tratamiento por medio del ejercicio terapéutico, calor, frío, luz, agua, masaje y electricidad. Además, la Fisioterapia incluye la ejecución de pruebas eléctricas y manuales para determinar el valor de la afectación y fuerza muscular, pruebas para determinar las capacidades funcionales, la amplitud del movimiento articular y medidas de la capacidad vital, así como ayudas diagnósticas para el control de la evolución”.
Entre todas las técnicas de las que se vale el fisioterapeuta para tratar y curar personas están incluidos los masajes, los estiramientos, el ejercicio terapéutico, el pilates, etc, o cualquier agente físico como la electroterapia, terapia con láser, ondas de choque o la diatermia, entre otros.
Además, la fisioterapia desempeña determinadas funciones como la asistencial que, independientemente dónde los fisioterapeutas desempeñemos nuestro trabajo, ya sea en un hospital, en un centro de salud o en una clínica de fisioterapia privada, como Fisiolys, todos los servicios que prestamos es en pro y en beneficio de la población, abarcando diferentes áreas como : neurología, uroginecología y obstetricia, geriatría, traumatología, reumatología, deporte, neumología, cardiología, oncología, estética, pediatría.
La osteopatía. Esa gran duda.
Al igual que el quiromasaje, la osteopatía tampoco está reglada en España, es decir, no es una formación universitaria y hay que recalcar que, hoy por hoy y según la ley, para poder ejercer como osteópata y con todas las garantías, una persona que ejerza y utilice la osteopatía entre sus técnicas, previamente tiene que haber obtenido el Grado Universitario de Fisioterapia.
La osteopatía, a grandes rasgos, a diferencia de la fisioterapia, intenta tratar los problemas con una visión o de una manera más global, más holística. Mientras, la fisioterapia, pone el foco de manera más intensa en el problema o en la en la patología buscando su origen.
Hay quienes consideran que la osteopatía no es fisioterapia y que gran parte de las técnicas que emplea están basadas en pseudociencia, eso lo dejaremos para otra entrada porque es un tema que da para mucho más y nuestra finalidad, con este primer artículo, es que sepas qué diferencias básicas existen entre estas tres técnicas.
Como profesionales sanitarios que somos, desde Fisiolys queremos dejar claro que, si quieres acudir a un osteópata, te asegures previamente de que la persona que te va a tratar tiene su título universitario, oficial y reglado de fisioterapeuta. Tu salud lo agradecerá.